Cuando la aurora llegue y comience un nuevo día, busque un momento de paz para escuchar a su alma . . .
Profundice en usted
mismo hasta donde ella mora . . . y escuchela . . . Capte su
vibración primera, la más bella melodía que interpreta el alma.
Allí en lo profundo de usted mismo sólo existen Voluntad . . . Amor . . . Sabiduría . . .
Allí sólo encontrará lo bueno y lo perfecto . . . Y eso es lo que es en vsu esencia.
Tome lo mejor de lo que allí palpita . . . lo mejor de usted mismo . . . y vuelva para empezar con ello el nuevo día.
Entonces serán tres veces buenos los frutos que trae cada día, pues llevarán la sabia pura de su mejor esencia.
Así, busque en cada día la
esencia buena que atesora su espíritu . . . allí en lo más profundo
de usted mismo, sazone con ella sus frutos. Y viva este día
como el mejor de su vida.
Concentre todas sus
energías en vivir intensamente estas pocas horas que tienes por delante .
. . Desde que la aurora le despierta, hasta que el descanso reparador le llama.
Olvide el ayer y deje el mañana para su momento . . . olvide sus errores pero recuerde la experiencia.
Y si ha de recordar . . .
recuerde sólo cosas buenas que iluminen este día . . . Porque es necio
llevar a cuesta hoy la carga del ayer.
Viva plenamente este día,
porque el hoy es el más hermoso don que tiene . . . Porque . . . la
vida es un eterno presente . . . Y haga de cada día suyo una oración a la
vida . . . Al Amor . . . A la Alegría . . . Un himno al todo creador .
.
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